El atleta morelense Moisés Martínez no solo dejó el alma por México durante la competencia de los 40 kilómetros del Mundial de Montaña y Trail celebrado en Tailandia, sino que literalmente también dejó las uñas de los pies al sufrir la caída de dos de ellas tras la dura prueba que se corrió sobre terrenos escabrosos de montaña en la ciudad de Chiang Mai.
A una semana de participar en su primer mundial de la especialidad, el oriundo de Yautepec regresó al país contento por el resultado obtenido que lo ubicó dentro de la élite mundial.
El morelense finalizó en el lugar 16 de la prueba que reunió a 85 corredores de los cinco continentes, y fue además el mejor latinoamericano y el segundo del continente sólo por detrás del estadounidense Max King.
Vivió apenas su segunda prueba dentro de la especialidad de Trail running, pues sus competencias habían sido solo en suelo plano en distancias de medio maratón (21 k).
A su regreso el corredor se dijo satisfecho y listo para seguir corriendo las mismas pruebas.
“La verdad fue algo que jamás imaginé poder vivir, el competir con corredores de otros países y sobre todo ante los mejores. Fue una competencia muy dura, las pendientes muy demandantes y bajadas muy técnicas”.
A esas condiciones de la ruta se agregó como factor importante la gran humedad en una ciudad como Chiang Mai ubicada a solo 300 metros sobre el nivel del mar.
“La humedad fue factor para que el rendimiento fuera disminuyendo considerablemente, por eso opté llevar un chaleco de hidratación y geles energéticos para prolongar más mi rendimiento y mantenerme hidratado; creo que me sirvió de mucho, ya que sólo había dos puntos abasteciendo durante toda la ruta, pero gracias a Dios pude mantenerme en el ritmo y las posiciones para terminar en ese lugar 16”.
Producto de la demandante prueba y de la sinuosa superficie, el atleta finalizó con dos uñas menos al perder las que recubren los dedos halluxs (gordos) del pie.
“Tuvo consecuencias el fuerte impacto en los pies, pero nada grave. Eso es algo normal que salgan ampollas por la ruta, pero también me afectó un poco más los tenis inapropiados al grado que se me cayeron las uñas de los pies”.
Recalcó que en definitiva el calzado no fue el más conveniente para la competencia: “usé unos tenis para terracería, pero para el descenso que tuvo mucho impacto, necesitaba algo diferente y en el momento de las bajadas, me lastimé los dedos grandes por el fuerte impacto”.
Martínez Peralta está ya en casa en franca recuperación, y sin dudarlo aseguró que estará en busca de acudir a otra participación mundialista en 2023.
“Gracias a Dios solo fueron un par de uñas, ya estoy mejor y pues seguiré preparándome para participar en más competencias que puedan dar más experiencia. La idea es buscar la clasificación para representar nuevamente a México el próximo año ahora en Austria”.
Por último, el corredor de 27 años agradeció a todos quienes hicieron posible su participación en el país del lejano oriente, ya que para ir al mundial tuvo que conseguir los recursos para el viaje redondo hasta la ciudad sede, recibiendo apoyo del club Azandica de Yautepec, con la organización de una carrera atlética en su beneficio y hasta rifas.
“Me siento muy contento de poder representar primeramente a las personas que confiaron en mí, que me apoyaron, y de igual manera a mi municipio, estado y país”, concluyó.
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